Compartimos un trabajo (VER AQUÍ) del Presidente del Instituto Latinoamericano del Ombudsman, Carlos Constenla en el que -con la pasión y erudición que lo caracterizan- aborda diversos aspectos de esta institución constitucional y resalta su importancia para la vigencia efectiva de los derechos.
«Desde este punto de vista y como lo pensó Ibsen, puede una asamblea declararlo un enemigo del pueblo. Pero entre el Dr. Stockman y el Defensor del Pueblo, hay un significativa diferencia: el Defensor del Pueblo no es un cruzado pero tiene una convencida y optimista fe en la misión que debe cumplir; no es un revolucionario pero tiene una clara conciencia del objetivo social que tiene su lucha por la libertad, la igualdad y la justicia y por último no es un amargado fatalista que sucumbe ante las dificultades y la hostilidad, sino alguien que confía en la crítica y en la transformación de la realidad.» VER TRABAJO COMPLETO AQUÍ